Un animal adulto también hace su elección cuando lo adoptas
Una de las cosas que no comprendo respecto a la decisión de acoger un animal en la vida, es que en la mayoría de los casos, la gente quiere que sea un bebé. Siendo una persona adulta, no llego a comprender esa manera de pensar. Yo como adulta, me entiendo mejor con otra persona adulta. Como hogar de paso, he tenido bastantes crías, porque no he podido mirar hacia otro lado, pero decidir que un animal formara parte de mi vida, siempre ha sido un vínculo con un animal adulto, Una forma de enamoramiento, una decisión de dos.
Hay tantos animales adultos en las calles que podrían vivir en hogares, que me parece que la gran mayoría de personas que no le dan la oportunidad a un animal que ha dejado de ser una cría, cometen un gran error. Adoptar a un animal adulto tiene muchísimas ventajas pues ya se sabe el carácter que tiene, su aspecto, su manera de comportarse y lo más importante, es una decisión sin presión porque el animal también hace su elección.
Hago esta reflexión en alto porque ellos no tienen voz y la inmensa mayoría de los animales que sobrepasan sus escasos primeros meses de vida, se convierten en invisibles. Si pudiéramos cambiar esa forma de pensar, seríamos como sociedad parte de la solución al problema que nos coloca como país, en el primer puesto de la Comunidad Europea con el mayor número de animales abandonados.
Carol Garrido
