En este nuevo número del boletín de salud laboral de CGT Andalucía, Ceuta y Melilla, abordamos un tema de máxima preocupación para la salud de quienes están expuestos a sustancias químicas peligrosas en sus entornos de trabajo: el cromo y, en particular, su forma hexavalente, conocida como cromo VI. Este metal, presente en diversas industrias como la de la galvanoplastia, el curtido de cuero, la producción de pigmentos, entre otras, supone un grave riesgo por su alta toxicidad y sus efectos cancerígenos.
A lo largo del boletín, profundizamos en la normativa REACH, que regula el uso de sustancias químicas en la Unión Europea, y que obliga a las empresas a registrar, evaluar y controlar rigurosamente la exposición a productos como el cromo VI. Además, se destacan las medidas preventivas necesarias para minimizar estos riesgos, como la sustitución de este metal por alternativas menos peligrosas, el control de la exposición mediante sistemas de ventilación y filtros, el uso de equipos de protección personal (EPP) adecuados y la capacitación continua de las plantillas.
Desde CGT-A, enfatizamos la importancia de avanzar en la eliminación del cromo VI y el compromiso de las empresas de reducir al mínimo la exposición a esta sustancia, que no solo amenaza la salud de las personas trabajadoras, sino también el entorno en el que vivimos. Es necesario intensificar la vigilancia y fortalecer los controles para asegurar entornos laborales más seguros, y desde nuestra organización seguiremos presionando para que se implementen políticas más estrictas y efectivas.
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