El pasado 21 de Enero, el Sindicato de Estudiantes publicó un comunicado bajo el título “La histeria de Vox ante la huelga feminista y antifascista del 6 de marzo ¡Basta ya de odio contra las mujeres y sus derechos!” que denunciaba insultos y amenazas y convocaba una huelga general estudiantil advirtiendo de que “detrás del llamado Pin parental” jaleado por Vox “se esconde su mensaje de odio contra las mujeres y sus derechos, su desprecio al movimiento feminista y a la comunidad LGTBI y su defensa de la violencia machista más despreciable”.
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Con motivo del Día Internacional de la Mujer Trabajadora del 8 de marzo y como muestra de su rechazo ante el pin parental, el Sindicato de Estudiantes ha convocado huelga de estudiantes el próximo 6 de marzo.
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Desafortunadamente, el discurso de odio machista, LGTBIfóbico, racista y reaccionario de la ultraderecha parece estar cada vez más presente en la sociedad.
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Así, el pasado lunes 20 de enero, las alumnas del Sindicato de Estudiantes recibieron amenazas que atentaban contra su integridad física y contra su condición de mujeres, que alentaban la cultura del odio y de la violación y que ensalzaban la figura del dictador Francisco Franco.
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Estos hechos suponen un ataque frontal no solo a las personas objeto de sus insultos, sino también hacia nuestra democracia.
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Llama especialmente la atención que los energúmenos que vierten estos comentarios violentos sean los mismos que se esconden tras el falso argumento de la libertad de expresión y de educación para justificar su odio visceral hacia quienes luchamos por conseguir una sociedad más justa, diversa e igualitaria.
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NO, NO ES LIBERTAD, ES ODIO.
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