Se ha cumplido el primer aniversario de la ley de bienestar animal en España y la situación de los animales en muchos municipios del país sigue siendo lamentable. El maltrato, el abandono y la falta de aplicación del método CER (Captura, esterilización y retorno) en las colonias felinas siguen siendo la estampa que nos retrata.
El estigma que tenemos como país respecto al maltrato y abandono animal continúa siendo el sello inequívoco de esta tierra, donde se hace una Odisea afrontar el gran problema existente, sin que sus responsables utilicen las herramientas a su alcance para controlar el abandono y vigilen la tenencia responsable.
El problema no deja de crecer y para muestra de falta de responsabilidad e interés, infinidad de Ayuntamientos, ni siquiera solicitaron las subvenciones para las entidades locales para aplicar el método CER que ya han sacado este y el año pasado o la solicitaron sin presentar los programas de gestión de colonias como requisito indispensable.
Muchos responsables municipales consideran complejo resolver esta situación, sin analizar la situación de su localidad, sin contemplar las fortalezas que tienen, como las asociaciones de protección animal y personas voluntarias dispuestas a formar parte de la solución.
No hacer nada, dilatando las actuaciones en el tiempo es la línea de resolución que mantienen para atajar el problema que no deja de crecer.
No es tan difícil dar solución a la situación de los animales, solo hay que tener voluntad de trabajar, destinar recursos públicos para que la protección y bienestar animal deje de depender casi exclusivamente del esfuerzo y recursos de asociaciones y personas voluntarias que no alcanzan para cortar este caudal que brota sin cesar.
Los registros de animales de compañía que los Ayuntamientos deben tener desde la ley andaluza del 2003, es la vía sencilla y directa para atajar el problema del abandono y falta de tenencia responsable, realizando una labor informativa y pedagógica, comunicando a la ciudadanía la obligatoriedad de que perros, gatos y hurones, tengan implantado el Micro chip antes de los 3 meses, así como la especie felina debe estar esterilizada antes de los seis meses, promoviendo además campañas informativas, de castración como de chipado a precios sociales, para que las excusas económicas no tengan justificación. Estamos ante una emergencia y no se puede tratar la tenencia de los animales como si de un artículo de lujo se tratara.
Si tras ese periodo informativo aún hay animales que son detectados, desprovistos de dicho microchip, la ley debe ser aplicada con la debida sanción, siendo implacable con el maltrato animal que por desgracia sucede con demasiada frecuencia y no está teniendo la respuesta por parte de las autoridades aplicando las leyes acorde a la gravedad de los actos.
Este problema que acarrea tanto sufrimiento a seres sintientes y sin voz que vagan por las calles y a un voluntariado que trata de paliarlo con sus propios recursos, es el día a día de los municipios y tiene solución, pero falta voluntad y ganas de trabajar de los responsables políticos que cobran por ello.
Tenemos leyes pero falta voluntad. Eso en esencia es el gran problema, donde los políticos de turno, son los primeros en incumplir las leyes de bienestar animal, por lo que hoy 4 de Octubre, no hay nada que celebrar en el día internacional de los animales.
Coordinadora de bienestar animal CGT-A
Carol Garrido