Impresionante. Un trabajo infatigable y creativo de autogestion.
Por la manana se trabaja: se limpia, se pinta, se preparan cada vez mas espacios, los servicios ya preparados: trabajo voluntario y autorganizado: las malas lenguas dicen que han visto a alguno de los que no han trabajado en su vida en Cai, sudando la gota gorda.
Por la tarde, continuas reuniones: logistica, programacion, comunicacion…se preparan multiples actividades, talleres, una escuela de verano. Reunion con los colectivos de la ciudad, nacen hermosos proyectos, una escuela de carnaval para ninos/as… Ya las primeras chirigotas que ensayaban en la calle, lo hacen en Valcarcel. El pueblo de Cadiz se esta empoderando del espacio. Se construye un sueno colectivo frente a la mirada atenta de la Caleta y del Barrio de la Vina-
Se ven vecinos/as del barrio, antiguos alumnos y alumnas visitando el edificio con emocion
Carnaval, jazz, musica cubana, sobre las 21 h,., el patio del Valcarcel se llena de sonidos y canciones que van haciendo historia, la de un edificio al que los politicos abandonaron, al que los mercados no pudieron convertir en dinero y que el pueblo de Cadiz, desde la autogestion, la asamblea y la autoorganizacion esta dando vida.
Nos sobran
