La ley de transparencia dice textualmente: “Plazo de resolución:Un mes desde la la recepción de la solicitud por el órgano competente para resolver. Podrá ser ampliado por otro mes en el caso de que el volumen o la complejidad de la información que se solicita así lo hagan necesario y previa notificación al solicitante.”
El pasado sábado cumplió el mes que establece la ley de transparencia sin que CGT haya tenido
acceso a los contratos de prórroga de la gestión del centro de menores La Purísima, tampoco ha recibido notificación de que se amplíe en un mes, máximo, el periodo alegando complejidad.
La actuación de la CAM la convierte en ciudad sin Ley, diremos mejor, en la ciudad de la ley del embudo, donde, como en el lejano Oeste, se impone sobre la de Transparencia.
El portal de transparencia de la CAM no contiene la información sobre los contratos solicitados o al menos la torpeza de esta Organización Sindical hace que no pueda acceder a los mismos, por ello se solicitaron formalmente.
Ley 19/2013, de 9 de diciembre, de Transparencia, Acceso a la Información Pública y Buen Gobierno permite tanto a personas físicas como jurídicas poder acceder a los contratos públicos conforme a lo establecido en el
propio desarrollo Reglamentario.
La opacidad que rodea a las prórrogas desde 2021 en adelante de la CAM con Arquisocial, como adjudicataria del servicio, debe desenmascararse no solo por interés público sino también porque de ello depende el futuro de la ejecución de las sentencias que afectan a la plantilla de la Purísima sobre la aplicación del IV Convenio Estatal de Reforma y sobre el abono retroactivo del plus de residencia, mucho más tras el rimbombante anuncio de la Consejera de políticas sociales y salud pública, Randa Mohamed, de que en noviembre se haría cargo TRAGSA, algo que parece claro que se va a convertir en un nuevo bulo del gobierno de Melilla puesto que la
CAM no ofrece datos en sus perfiles de órganos de contratación sobre la anunciada concesión a Transformación Agraria SA (TRAGSA) del Centro de menores la Purísima.
La publicidad y transparencia de los encargos a empresas públicas denominadas “medios propios” es una obligación a la que están sujetas las administraciones públicas, aunque se demuestra día a día que el gobierno de la CAM quiere una ciudad sin ley, donde imperan los autoritarismos, dejando al margen de la legislación española y comunitaria.
CGT va a dejar caer por su peso el último bulo de la Consejera y todo el mundo podrá comprobar cómo esta y sus palmeros vuelven a mentir y en noviembre seguirá Arquisocial siendo el azote de los menores y de la plantilla de la Purísima, por lo que no vamos a realizar la acción de protesta prevista para el 30 de octubre para hacer la prueba del algodón, y el algodón no engaña, centrándonos en una gran protesta pública para el próximo 13 de noviembre por la MUNICIPALIZACIÓN que será concretada y hecha pública oportunamente.
En CGT lamentamos que se esté jugando con el futuro de la plantilla y con el día a día de unos menores que pasan todo tipo de penurias derivadas del abandono institucional, que rayan lo inhumano por las carencias que padecen en un centro público de negocio privado.
Es el
Momento de quitarse las caretas y de que impere la veracidad, por el bien común y social, por el bien de los menores de La Purísima y de su plantilla, mientras esto no se dé y se siga parcheando para disuadir con supuestas soluciones mágicas, desde CGT vamos a seguir clamando por la gestión directa municipal (MUNICIPALIZACIÓN) y por la transparencia, por ello el 13 de noviembre volveremos a las calles de Melilla a gritarlo, sin tapujos.
Basta ya de ocultismo y paños calientes en La Purísima, la solución es la MUNICIPALIZACIÓN